Gucho y César en la Isla de las Zanahorias

El libro del que quiero hablarte hoy tiene ya una larga trayectoria: fue publicado originariamente en el año 1968 y, además, la saga de este par de amigos inauguró el cómic infantil en Polonia. Toda una joya que quería presentaros ya que las aventuras de Gucho y César son un clásico de la literatura infantil que aún llegan a nosotros de una manera fresca, divertida y muy cercana. Todo un acierto para incluirlo en la biblioteca personal de nuestros peques.

Krystyna Boglar y Bohdan Butenko son los creadores de este par de personajes icónicos de la cultura polaca. Gucho es un hipopótamo bonachón que está constantemente hambriento y pensando en comida ¡un verdadero glotón! César, por su lado, es un perrito muy imaginativo que siempre está en las nubes. En esta primera historia ambos vivirán una emocionante aventura en la que aprenderán a sumar y multiplicar.

Reseña de Gucho y César en la Isla de las Zanahorias.

La mañana en el cole está siendo muy larga y nuestros protagonistas comienzan a dejar de prestar atención a la señorita Jirafa ¡tienen hambre! La profesora está preguntando las tablas de multiplicar pero como ni Gucho ni César estaban prestando atención, no saben la respuesta… A la hora del recreo sucederá algo tremendamente emocionante y peligroso: unos corsarios hambrientos llegan a tierra y secuestran a Gucho con la intención de comérselo (si es que está tan rellenito que será parte de un buen estofado). Cuando César se percata de lo que ha sucedido no dudará en ir a salvar a su mejor amigo de las garras de esos terribles piratas ¡y lo logra! Es así como llegarán a la Isla de las Zanahorias donde comenzará una loca aventura en la que ambos amigos se irán ayudando en los distintos peligros que se encuentran. Pero no todo son enemigos para Gucho y César, también durante su aventura encontrarán a otros animales dispuestos a echarles una mano para regresar sanos y salvo a casa. Además, los dos amigos necesitarán realizar algunas sencillas operaciones matemáticas para saber cuánto esperar, a dónde ir o cuánta medicina tomar, por ejemplo.

 

Gucho y César en la Isla de la Zanahoria es una propuesta que gustará mucho a vuestros pequeños lectores porque el formato cómic es muy atractivo para casi todos ellos; los dibujos son muy básicos (casi infantiles) y en blanco y negro (que estoy segura de que a más de uno y una se le ocurrirá la idea de querer colorearlos) y, además, la fuerte amistad y las locas aventuras de estos dos animalillos son ingredientes que nunca fallan. Es un libro infantil que, como ves, pueden manejar perfectamente los peques que estén comenzando a leer texto pero antes de dar este paso la historia de Gucho y César puede ser leída a través de sus imágenes.

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