Con la llegada de las vacaciones el veranad se convierte en un buen momento para poner en práctica estos trucos que nos recomiendan PantallasAmigas, fundación MAPFRE y Twitter en su nueva campaña “10 trucos para reducir el uso del móvil”. Una iniciativa que nace con la idea de hacer un buen uso, y no un abuso, del teléfono móvil en el entorno familiar.
Estar siempre disponible, recibir decenas de mensajes en otros tantos grupos numerosos, atender de forma inmediata e instintiva a las notificaciones… cada día nos encontramos atrapados por costumbres y obligaciones prescindibles creadas de forma inconsciente que consumen nuestro tiempo y ocupan nuestra vida.
Para cambiar algo lo primero es darse cuenta de la naturaleza y alcance de la cuestión. Lo siguiente es seguir un plan con determinación para lograrlo. Es posible que ya seamos conscientes de que pasamos mucho tiempo atendiendo el móvil, pendientes de todo lo que nos llega o podemos acceder a través de él, y que eso condiciona nuestra vida. Muchas familias viven con angustia este problema que puede derivar incluso en consecuencias graves en edades tempranas.
La campaña propone pautas para combatir la tendencia al uso excesivo del móvil, pequeños trucos para poner en marcha de inmediato, dirigidos tanto a las personas adultas como a las adolescentes y jóvenes. La época estival supone un cambio de ritmos y rutinas que puede ser aprovechado para establecer hábitos más sostenibles.
Percepción, exceso de uso y hábitos poco saludables
El estudio SmartHuman, participado por PantallasAmigas, con respuestas de más de 1.300 alumnos de 1ª ESO arrojó datos significativos en relación al uso nocturno del móvil:
- El 7,4 % sigue usándolo pasadas las 12 de la noche.
- El 61% se lleva el móvil al dormitorio durante la noche y, de ellos, el 18% lo deja plenamente operativo, siendo el 17,5 % de los encuestados quienes incluso lo chequean si se despiertan.
En relación con la afectación de su vida diaria, al margen de la falta de sueño (vamping), el análisis evidenció los siguientes datos:
- El 58 % manifestó perder la noción del tiempo cuando lo está usando.
- El 25 % reconoce que, por el Smartphone, ha dejado de hacer rutinas como estudiar o ver a sus amigos.
- El 42 % cree que su rendimiento académico se ha visto afectado bastantes veces por el uso de la red.
- El 67% abandona lo que está haciendo para atenderlo mientras que un 51% se enfada si le interrumpen.
En lo concerniente al tiempo de uso y su percepción, el estudio desveló datos reveladores:
- El 13 % usa el móvil más de 6 horas al día durante la semana, cifra que alcanza el 23 % durante el fin de semana.
- El 26% afirma que sus padres usan más el móvil que ellos
- El 77 % considera que los adolescentes de su edad hacen un uso excesivo del teléfono móvil.
- El 56% manifiesta su voluntad de usar menos el smartphone.
Este estudio fue realizado en los meses previos al confinamiento por lo que, tras el mismo, cabe pensar que estas experiencias y prácticas asociadas al uso excesivo e incluso compulsivo se habrán incrementado de forma notable.
Los 10 trucos para reducir el uso del móvil
Las diez sencillas medidas propuestas para adoptar en nuestro día a día y que contribuyen a un uso más consciente y racional del móvil son:
1. Analiza cuánto y cómo usas el móvil y lo que te pierdes por ello. Tener información ayuda a tomar conciencia y buenas decisiones.
2. Desactiva el móvil desde antes de cenar hasta después de desayunar. Desconectar por la noche es necesario para la relajación y el descanso.
3. Elimina sonidos y vibraciones asociadas a las notificaciones. Evitar que reclamen tu atención facilita mantener el control.
4. Retira de la pantalla principal apps que avisan de actividad pendiente. Tener que buscar si hay algo pendiente obliga a tomar conciencia de cuándo hacerlo.
5. Restringe tu participación en grupos de mensajería instantánea. Reducir la presencia en colectivos numerosos proporciona tiempo extra.
6. Define tus propios ritmos de comunicación y compártelos. Contar a tus contactos tus decisiones evita malentendidos y ayuda a desconectar.
7. Pon en modo avión el móvil siempre que estés comiendo. Establecer momentos de no disponibilidad es una oportunidad y una necesidad.
8. Identifica momentos donde no precisas el móvil y ponlo fuera de alcance. Dificultar el acceso al dispositivo requiere un esfuerzo consciente para usarlo.
9. Piensa en tus ojos, tus cervicales, tu espalda… y dales descanso. Reducir el uso del móvil aumenta el bienestar físico.
10. Llama más, cítate más… comparte vida fuera de las pantallas. Cultivar el contacto directo permite valorar y disfrutar sus virtudes.
¿Cuáles son vuestros trucos para disfrutar más de la familia y controlar el uso de los dispositivos móviles?
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