El juego de mesa que hoy quiero enseñarte llegó a casa también estas Navidades y aunque es muy distinto a El Frutal, del que te hablé la semana pasada, Carcassonne Junior también nos ha encantado. En este caso sí tenemos que competir entre nosotros por colocar todos nuestros personajes en el tablero, lo que a veces provoca algún que otro enfado. Sin embargo, el tener que pensar en estrategias nos gusta mucho y este hecho lo convierte en un aliado genial para potenciar la lógica y poner a trabajar al cerebro ;).
"El 14 de julio es un día muy especial en Carcasona. Es el día de la fiesta nacional de Francia, y en este pueblo es tradición soltar a las ovejas, las gallinas y las vacas. Los niños de Carcasona se lo pasan en grande todo el día intentando devolver todos los animales a sus corrales antes de que se ponga el Sol".
El juego consta de 32 figuritas de madera, que emulan a los niños de Carcassonne, en cuatro colores distintos (ocho figuras para cada jugador) y 36 piezas de terreno. Para comenzar el juego deberemos mezclar bien las piezas de terreno y hacer varios montones (los colocamos boca abajo).
Colocaremos en el centro de la mesa la primera pieza del terreno y comenzaremos la partida entonces. Será el jugador más pequeño el que cogerá la primera pieza del terreno y la colocará al lado de la primera. Así todos los jugadores irán poniendo piezas del terreno.
El fin de Carcassonne Junior es colocar todas las figuritas de madera, así que lo que tenemos que intentar es ir cerrando los caminos y que en ese camino cerrado haya figuras de nuestro color. Es decir, si una pieza de terreno tiene una casa y de esa casa sale un camino que termina en otra casa, un río o no tiene salida y en dicho camino hay muñecos de nuestro color, los colocaremos, también lo colocarán otros jugadores si en el mismo camino hay muñecos de su color... Así que cuidado con esto ¡que a veces ayudamos mucho a los demás sin querer y se adelantan, ja, ja, ja, ja!
La partida finaliza en el momento en el que un jugador haya colocado todos sus muñecos sobre las piezas del terreno. Puede haber más ganadores, claro. También puede darse el caso de haber terminado de colocar todas las piezas del tablero y que aún nos queden personajes que colocar, en este caso ganaría el jugador que más piezas tengas puestas sobre el tablero.
Carcassonne Junior es la versión infantil del clásico Carcassonne, es ideal a partir de los 4-5 años (Toin con cinco a veces se despista y no entiende que tiene que cerrar el camino) y las partidas son muy ágiles, algo que les obliga a mantener la concentración a los peques. ¡Nos ha encantado!
Los ancianos cuentan fascinantes historias de caballeros, hadas y dragones, mientras los chiquillos escuchan atentos, soñando con tiempos pasados y esperando que un día ellos puedan vivir aventuras parecidas.
Luego, los más pequeños se van a la cama mientras los animales, por suerte, vuelven a descansar en sus corrales.
Al caer la noche, los animales que nadie ha capturado regresan cansados junto con el resto de animales. Y es que los niños de Carcasona cuidan muy bien de sus ovejas, gatos, perros y gallinas...".
¿Conoces este divertido juego?
4 Comentarios sobre el post
Mola, me lo apunto para Mis Piratas y nosotros, gracias por la recomendación
ResponderEliminarDe nada! Un beso
EliminarNosotros tenemos el carcassone de toda la vida y el de dos jugadores. Tal y como lo explicas, creo que con el normal podemos jugar con los peques. Sólo es un poco más complicado si no recuerdo mal :D
ResponderEliminarGracias por la reseña!!
Sí, supongo que la dinámica será algo similar. Si tenéis el otro quizá lo podáis adaptar. Ya me contarás :).
EliminarY tú, ¿qué opinas? ;)